Construcción colectiva del relato

Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación han hecho posible, gracias a la digitalización de los datos, ya sean de tipo gráfico, sonoro o visual, una nueva manera de concebir la realidad, en este caso desde el punto de vista programático y sistemático, que integra no sólo la realidad de las cosas que existen, sino que va más allá de lo que realmente puede concebirse en el mundo.

En este sentido, el mundo de la digitalización permitiría hablar de una metafísica de lo real, donde no sólo lo que existe en cuanto tal, es decir, aquello que tiene un ser (sustancia, esencia y accidentes) en cuanto tal, ya no entra dentro del mundo de lo que se es, sino que hay algo más que lo abarca.

Un ejemplo claro de esta nueva percepción es evidente en las imágenes numéricas, que en palabras de Liliana Hernández, “son aquellas generadas a partir de algoritmos, es decir de un ensamble de reglas operativas propias a ciertos tipos de cálculos o de razonamientos lógicos”[1]. En este sentido, es como si se materializara lo que se tiene en la razón, es como si se pudieran leer los pensamientos de una manera directa, puesto que las nuevas tecnologías permiten “materializar” lo imposible.

Este tipo de herramientas ocasiona un choque entre la manera tradicional de relatar y la nueva manera de hacerlo. Es así como un texto puede ser visto con una forma epistemológica que rompe con el mundo tangible para entrar en una realidad que podría decirse que es irreal. La introducción de los medios electrónicos en el relato permite una nueva dinámica de acercarse al texto al punto tal que el receptor es capaz de interactuar con él y también contribuir con el autor para darle vida.

Una de las características de esta nueva manera de contar las historias está en que el tiempo de la misma es el tiempo que el receptor dedica para escudriñarla, no hay una cronología concreta ni un espacio físico real.

La interactividad de los nuevos medios de comunicación, permite construir un discurso colectivo, en el que el relato está compuesto también por la obra en sí, el autor de la idea y el aporte de los receptores, permitiendo de esta manera crear un producto inacabado que se va construyendo en la medida en que es conocido por más personas que le agregan una parte de su pensamiento e identidad.

Podría decirse que los medios de comunicación permiten hacer de un texto, una biblia que agrupa una selección de relatos diferentes y con una construcción cronológica que depende de lo que se quiere expresar y por quién se quiere expresar. Esto permite indicar que las creaciones electrónicas permiten establecer un nuevo tipo de relación entre la obra, el autor y los receptores.


[1] HERNÁDEZ GARCÍA, Liliana. Imagen numérica y creaciones electrónicas. p. 142

2 comentarios »

  1. krls Said:

    hola … me gustaria saber si esta reinterpretacion de hand fixind hand de escher es de usted o de algun artista contemporaneo gracias por su atencion y buen documento

    • cepefra Said:

      HOLA KRLS, NO, NO ES MÍA, ES SÓLO UNA IMAGEN QUE PUSE PARA ILUSTRAR EL CONTENIDO DEL ARTÍCULO. GRACIAS POR EL COMENTARIO


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